Fases del Emprendimiento basadas en experiencias reales
Después de 23 años siendo consejero y habiendo conversado con más de mil emprendedores, puedo decir que el camino del emprendimiento no es lineal. Sin embargo, hay etapas que, de forma general, toda empresa transita. A continuación, las describo:
1. Creación o Emprendimiento:
Aquí es donde todo comienza. En este punto, los emprendedores buscan validar su idea en el mercado y escalarla. Si no logran estos dos objetivos en los primeros dos o tres años, puede ser el momento de repensar y empezar de nuevo.
2. Crecimiento:
Una vez que el emprendedor encuentra su nicho y logra monetizar su idea, se enfoca en expandir su base de clientes. Sin embargo, esta etapa tiene sus propios desafíos, ya que la tentación de aceptar todo tipo de clientes puede llevar a un crecimiento insostenible. Es crucial tener una visión clara y no perderse en la carrera hacia el «infinito y más allá».
3. Changarrización:
A veces, en la euforia del crecimiento, las empresas caen en una trampa de errores y sobrecarga. Se convierten en un «changarro» donde todo depende del director general, generando vulnerabilidades en todos los frentes.
4. Profesionalización:
Aquí es donde se vuelve imperativo que las empresas hagan una pausa, se reestructuren y se enfoquen en generar un flujo de efectivo sano y estable. Esto implica delegar, construir equipos fuertes y redefinir la visión de la empresa.
5. Institucionalización:
Esta es la fase final, donde las empresas se preparan para el futuro, ya sea a través de la sucesión o mediante la expansión planeada y estructurada. Aquí, los fundadores suelen pasar a roles de mentores o consejeros, asegurando que su legado perdure.
Reflexión Final:
Si te identificaste con la etapa de «changarro», no te desanimes. En realidad, esto representa una oportunidad. Una oportunidad para reconocer tus desafíos y para saber que hay un camino claro hacia la profesionalización y el éxito sostenible.
